El Fiscal General de la República, Douglas Meléndez verificó en la madrugada de este lunes los registros que llevaron a golpear nuevamente a tres estructuras de narcotraficantes que operaban a nivel nacional e internacional; además, contaban con la colaboración de al menos 3 agentes de la Policía Nacional Civil (PNC).
Los dispositivos de manera simultánea fueron dirigidos hacia puntos específicos a nivel nacional en donde los delincuentes realizaban sus operaciones, por la cual los dispositivos se enmarcaron en la denominada “Operación Nexos Narcos”.
“En esta operación la Fiscalía ha ordenado 83 allanamientos en 9 departamentos. Se han girado 50 órdenes de captura, entre las que destacan las de Luis Alejandro Cruz Lorenzana, Roberto Carlos Portillo Maltez, Bernardo Adalid Magaña Artero, Asmel Arturo Bercián Rivera y José Adán Silva Bercián”, detalló el Fiscal General.
Se ha determinado que Magaña Artero, es exdirigente futbolístico y otro capturado es Jorge David Ávalos, excandidato a alcalde de Jicalapa, La Libertad. Pero además, Bercián Rivera y Silva Bercián, es el padre y el otro es hermano, respectivamente, de Moris Alexander Bercián Machón, alias “Barney”, quien actualmente es prófugo de la justicia.
En los registros, se han incautado más de 23,000 dólares, diferentes armas de fuego, vehículos, motocicletas y propiedades de algunos implicados ubicadas en Sonsonate. También, los fiscales Antinarcotráfico han establecido la participación de traficantes de drogas de Costa Rica, Guatemala y otros países, quienes junto a los ahora capturados en la Operación, se dedicaban a comercializar droga proveniente de Colombia.
Respecto a las detenciones de los tres miembros de la PNC, se establece que ayudaban a los líderes de las tres estructuras de narcotraficantes para que evadieran controles, advertían sobre la presencia policial, entre otras acciones.
En varias de las viviendas de los imputados se ha encontrado abundante material para realizar santería y magia negra, rituales que son característicos de narcotraficantes consumados. Una de esas casas fue ubicada en la calle Motocross, en San Salvador, en donde se encontró material de ese tipo.
Asimismo en una vivienda en el Barrio San Jacinto, se encontraron sellos de diferentes compañías bancarias, de médicos y talonarios para incapacidades, así como de algunas municipalidades y principalmente de la División Contra el Crimen Organizado (DECO) de la PNC y de la Unidad Especializado de Crimen Organizado de la FGR, así como documentos falsificados de diferentes juzgados y gran cantidad de informe tributarios y de la embajada de Los Estados Unidos. Toda será debidamente analizada.
Las investigaciones de la FGR iniciaron en el año 2016, con una serie de decomisos de drogas en San Salvador, San Miguel y Sonsonate, donde se estableció la participación de los implicados en dichas estructuras delincuenciales.
