Dos de los imputados enfrentan un proceso por haber cometido delitos graves en San Salvador, mientras a un tercer acusado le fue encontrada documentación que lo relaciona laboralmente con el FSV.
San Miguel. La Fiscalía General de la República, FGR, dio a conocer esta tarde que el Juzgado de Paz de Moncagua, en San Miguel, decretó la instrucción formal del proceso con la detención provisional para cinco personas, vinculadas a actividades relacionadas al narcotráfico en el Oriente del país. Fueron capturados cuando pretendían hacer transacciones de droga por un monto que superó los US$37,000.00
La Unidad Antinarcotráfico de San Miguel informó que los imputados son Roberto Carlos Bonilla Mancía, Jammie Katherine Cuestas Hernández, Miguel Alexander Hernández Soriano, Jacqueline Lorena Molina Acosta y José Luis López Vásquez. Fueron llevados este jueves a la audiencia inicial ante el Juzgado ya referido, bajo acusación del delito de Tráfico Ilícito.
Y es que, de acuerdo a las investigaciones, se conoció sobre las transacciones que un grupo de narcotraficantes realizaría el pasado 13 de los corrientes, precisamente en el desvío a la ciudad de Moncagua, por lo que esa Unidad Fiscal emitió el correspondiente direccionamiento funcional, para que la PNC montara los correspondientes dispositivos policiales. Fue precisamente como a la 1:30 de la tarde cuando a bordo de tres vehículos, llegaron dichas personas hasta la estación de servicio que se ubica en el Desvío.
Sin embargo, uno de los sospechosos logró identificar los vehículos policiales, por lo que huyó de la zona, pero fue interceptado a unos kilómetros adelante en la misma jurisdicción, mientras que los agentes procedieron a las detenciones de los demás vinculados.
Tras los registros, se encontró en el baúl de un vehículo un total de 60 porciones de marihuana, mientras que en un segundo auto se encontraron 70 porciones más. Los análisis posteriores han determinado que el peso de la droga fue de 33,307.0 gramos, por un valor económico de US$37,969.50.
Se ha conocido que Hernández Soriano y Molina Acosta, actualmente gozan de medidas alternas a la detención por un proceso que enfrentan en la jurisdicción de Mejicanos, en San Salvador, en donde se les atribuye graves delitos.
En cuanto a Bonilla Mancía, se le descubrió que tenía identificación que hace constar que labora en el Fondo Social de la Vivienda, FSV, y además portaba autorización para circular a nivel nacional y apoyar la emergencia relacionada a la pandemia COVID-19.
Todos han sido enviados a un centro penitenciario de la región en espera que se desarrolle la siguiente etapa del proceso.
