Un juzgado de esta capital validó la investigación de la Fiscalía General de la República al resolver que tres miembros de estructura deban permanecer en prisión por haber participado en el alza de homicidios del año pasado. Ahora, las investigaciones están siendo ampliadas en los diferentes casos que están bajo investigación con la finalidad de castigar penalmente a quienes han dirigido estas acciones.
La Unidad de Vida de la Oficina de San Salvador dio a conocer que a las detenciones que anteriormente se han ordenado en este caso, se suman las de los imputados Jonathan Gustavo Mejía Quinteros, alias “Terror”; Jonathan Gil Alfaro Viachica, alias “Drive” y Luis Mario Sánchez Lemus, alias “Scooby”. De igual forma, en este caso figura un adolescente en conflicto con la ley, quien está internado en un centro de reeducación, mientras se indaga su participación.
Estos sujetos son procesados por los delitos Homicidio Agravado y Agrupaciones ilícitas, ya que también se ha establecido que tienen diferentes responsabilidades dentro de la estructura al haber dirigido las operaciones criminales.
Para el caso, Mejía Quinteros, está perfilado como “corredor de clica” y tras haber ordenado y participar en los hechos, había huido hacia Sonsonate, en donde fue ubicado y aprehendido mediante orden emitida por esa Oficina Fiscal.
Los tres involucrados no solo responderán penalmente por el incremento de los crímenes en noviembre del 2021, sino que además se les aplicará justicia por un asesinato cometido sobre la Calle México, en esta ciudad, cometido en el mismo periodo.
”Los imputados han participado en la planeación, subordinación , aprovisionamiento de vehículos y armas para materializar los hechos criminales” explicó el fiscal asignado al proceso.
Luego de ser notificada la resolución por parte del Juzgado Octavo de Paz, los implicados han quedado a disposición de la Dirección de Centros Penales, para que sean enviados al respectivo centro penitenciario.
De esta manera la Fiscalía General de la República continuará realizando sus mejores esfuerzos para impactar tanto a los líderes o cabecillas de estructuras, así como a los autores materiales de los hechos criminales.
