Condenan a siete terroristas de la MS por el delito de Privación de Libertad

Por: / junio 5, 2018

Santa Ana. La Unidad de Delitos Relativos a la Vida de la oficina Fiscal de Santa Ana, logra que siete terroristas de una estructura de la Mara Salvatrucha, que operan en el municipio de Candelaria la Frontera; fueron condenados a siete años de prisión, luego de ser acusados del delito de Privación de Libertad en la modalidad de Agravada, perpetrada el 7 de septiembre de 2017, en perjuicio de Gabriel Higinio Gálvez Quijada, de 21 años; ocurrido en la Cancha de fútbol del caserío Las Cristalinas, del cantón El Jute, del Municipio de Candelaria de la Frontera, en el  Departamento de Santa Ana.-

Los imputados fueron identificados como: Jairo Alonso Menjivar Chinchilla, alias “Seco”, 19 años; Carlos Eduardo Vargas Gómez, alias “Pato”, de 22 años; Francisco Antonio Mejia Lima, alias “Guachiry”,  de 22 años; Ariel Gómez Gómez, alias “Smoll”, de  22 años; Héctor Elías Barrera Virula, alias “Liro” Cartoon”,  de 20 años; Manuel de Jesús Mendoza Ordoñez, alias “Extra”, de 19 años, y Jesús Alberto Gonzáles Nájera, alias  “Wuassen” o Chuz”, de 19 años de edad; informó el jefe de la oficina Fiscal de Santa Ana, Max Muñoz.

Durante la vista pública desarrollada por el Tribunal Primero de  Sentencia de Santa Ana, el 4 de Junio de 2018, la representación Fiscal, presentó todas las pruebas de cargo, contando con la comparecencia del testigo protegido con clave “Forastero”, donde al final el Tribunal dio validez a la acusación Fiscal, encontró a los acusados responsables del delito de Privación de Libertad en la modalidad de Agravada, imponiendo una condena de siete  años de prisión, para cada uno.

Relata el testigo clave ”Forastero”, que encontraba viendo un partido de fútbol, junto a Gabriel Gálvez Quijada, acercándose a ellos un joven que  conoce como Jairo, a quien dentro de la MS le dicen el “Seco”, este sujeto le dijo a Gabriel que quería platicar con él, pero que no ese lugar, por lo que comenzaron a caminar;  a todo esto, el testigo no sabía para donde iban, hasta llegar a una  casa abandonada, donde  se encontraban otros sujetos, a quienes identificó por sus alias, observando que tenían en sus manos armas larga y cortas.

Luego vio que todos los sujetos le hicieron un rueda a Gabriel, y continuamente le preguntaban si era de la pandilla 18, a lo que Gabriel les respondía que no, luego afirma el testigo que todos levantaron sus armas y comenzaron a golpear a Gabriel, con las culatas y cachas de las armas, y fue el  “Wuassen“  y  “Extra” los que  dispararon con sus  armas a Gabriel, quien cayó al suelo; y en ese instante el “Extra” les dijo que sacaran del lugar al testigo, para que ya no siguiera viendo lo que estaban haciendo

Y luego se lo llevan  del lugar, diciéndole  la expresión “ver oír y Callar”,  y en el camino  le recalcaron que no fuera a decir nada porque si comentaba acerca de lo sucedido el próximo que iban a matar seria él, además le dijo que a su amigo ya no lo iba a volver a ver; relata el testigo que desde ese día ya no ha visto a su amigo Gabriel.