Pandilleros de la MS condenados a 37 años de prisión por homicidio

Por: / enero 18, 2018

Santa Ana. La Unidad de Delitos Relativos a la Vida e Integridad Física de la oficina Fiscal de Santa Ana, logró sentencia condenatoria de 37 años con seis meses de prisión, contra tres miembros activos de la MS, después de que un Tribunal los encontrara culpables del delito de Homicidio Agravado, en perjuicio de un adolecente de 14 años de edad y Homicidio Agravado Tentado, contra una persona que goza de régimen de protección clave “Delta”; hecho ocurrido el 24 marzo de 2015, en Río Amulunga, del municipio de Chalchuapa, departamento  de Santa Ana.

El Jefe de esta oficina Fiscal, Max Muñoz, identifico a los imputados como: Gerson Stanislao Lino Alas, de 24 años de edad; José Mario Argueta Hernández, de 25 años de edad y José Wilfredo Rodríguez Membreño, de 29 años de edad; quienes fueron llevados a la vista pública ante en el Tribunal Segundo de Sentencia de Santa Ana, el 15 de enero de 2018.

Durante la audiencia los Fiscales del caso en su intervención presentaron las pruebas de cargo de tipo pericial, documental y principalmente la declaración del testigo con régimen de protección a víctimas y testigos de clave “Delta”, con lo que se logró individualizar la participación de cada uno delos tres imputados.

Posterior a los alegatos, el tribunal valido la evidencia presentada por la Fiscalía General de la República (FGR), dictando el fallo condenatorio de la siguiente manera: José Mario Argueta Hernández y José Wilfredo Rodríguez Membreño; por el delito de Homicidio Agravado 25 años y por el Homicidio Agravado Imperfecto 12 años y 6 meses, haciendo un total de 37 años con seis meses de prisión para cada uno.

Mientras que en el caso  Gerson Estanislao Lino Alas, la acción penal se extinguió, debido a que él falleció en el Centro Penal de Ciudad Barrios, departamento de San Miguel, de tuberculosis.

El hecho se origina cuando las víctimas se encontraban esperando que abrieran un taller mecánico, ya que el camión donde trabajaban, había sufrido desperfectos mecánicos; al lugar se acercó un joven con cuatro sujetos más, uno de ellos iba armado;  comenzando a interrogarlos sobre si ellos eran de pandilla, luego los privan de libertad, llevándolos a una casa abandonada, donde los desnudan para ver si no tenían tatuajes y les decían que los iban a matar.

Después de casi cuatro horas se llevaron a los dos jóvenes un río Amulunga, donde les dispararon cayendo ambos al río; el testigo “Delta”, quien sobrevivió a los disparos, logró salir del río, pero se desmayó. La mañana siguiente trato de ponerse en pie para pedir ayuda llegando a la carretera, hasta que lo auxiliaron, y lo trasladaron a un centro hospitalario donde permaneció tres meses ingresado.